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viernes, 17 de agosto de 2012

La LEY del KARMA: Lo que siembras recoges


La Ley del Karma

La ley del Karma es algo así como la ley de causa y efecto, la ley de lo que siembras recoges, la ley del efecto dominó o la ley del bumerán… En pocas palabras “todo se devuelve”
Y a veces nos preguntamos –Si yo he hecho las cosas bien, ¿Por qué me pasa esto?
Y una cosa es las pruebas que nos pone la vida y otra muy diferente es el Karma y hay que saber diferenciarlas.
Karma: Lo malo que haces se te devuelve tarde o temprano.
Pruebas de la vida: Algún acontecimiento aparentemente malo que me traerá algún nuevo aprendizaje y algo mejor para mi vida.
Y volviendo al Karma, es increíble él como el tiempo y la vida siempre siempre pone las cosas y a las personas en su lugar, sobre todo a quienes han obrado mal de alguna forma u otra… Es cuestión de paciencia, uno no tiene que hacer nada, y mucho menos tomar venganza ya que ello nos traerá Karma a nosotros mismos.
Otras veces nos preguntamos por qué a las personas malas o que nos han hecho algún daño no se les devuelve y la verdad es que si, pero no siempre se les devuelve a la luz del día ni a la vista de todos…es más, la mayoría de las veces ni siquiera nos damos cuenta de cómo se les devuelve ya que llegan a ser cosas tan dolorosas y penosas para ellos que ni siquiera las ventilan, además de que por seguir aparentando felicidad a veces ni las mencionan.
¿Y como evitar ser atacados por el Karma? La respuesta es muy simple y muy escuchada en diferentes frases, aquí no hay nada nuevo ni se está descubriendo el hilo negro:
  • Si quieres ser bien tratado, trata bien a otros.
  • Si quieres ser bendecido con prosperidad y abundancia, se
    generoso y caritativo con el prójimo, especialmente con los más necesitados.
  • Si quieres aprendizaje y sabiduría, comparte lo que sabes y
    enseña a otros.
  • En el cómo das esta el cómo recibes.
  • No hagas a otros lo que no quieras que te hagan a ti.
  • Si no quieres que te engañen, se justo con los demás.
  • Si no quieres ser juzgado no juzgues.
  • Si no quieres que te critique no critiques.
¡Son pocos los que salen bien librados de sus malas acciones!

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